Cada año hay mil grupos más de
odio que el anterior en redes sociales como Facebook y Twitter.
Por Gabriela Fuentes
Hay un fenómeno que se ha
convertido en algo usual en algunas de las principales redes sociales. Se trata
de grupos que promulgan el odio y que
aumentaron en un 25 por ciento hasta el 2009, según un informe del
Centro Simon Wiesenthal de Los Ángeles, dedicado a vigilar y denunciar
actividades antisemitas en todo el mundo.
El estudio encontró que más de
11.500 redes sociales, páginas web, foros y blogs fomentan la violencia, el
antisemitismo, la homofobia, la música insultante y ofensiva y el terrorismo.
La cifra supone un aumento frente a los 10.000 casos del año anterior al
estudio.
En Facebook se pueden encontrar
grupos como "El día nacional de patear a un pelirrojo" o "Me
encanta pegarle a currys (expresión despectiva para personas de origen
indio)".
“Yo odio a Ricardo Fort”, que
tiene 1.453.370 seguidores; “Odio A Botero”, “Yo también odio a Dr. Krapula”,
“Odiamos a Jota Mario Valencia”, a Piedad Córdoba, a los Emos, entre muchos más.
Un polémico grupo de Facebook: “Odio a las Mujeres”, fue calificado como
violento y discriminatorio. Con más de
tres mil seguidores, la página incluía imágenes de golpizas y amenazas de
hombres a mujeres, así como violentos mensajes misóginos, homofóbicos y racistas.
“Un hombre miembro del clan no
debe pegarle a otro hombre. Si lo hace estaría traicionando a su propio sexo”,
indicaba la página al definir el perfil de sus seguidores, para luego añadir
que “un hombre miembro de este clan no puede ser gay, puede gustarle las
mujeres pero no tener novias. Solo violarlas y hacerlas sufrir”.
La activista de Movilh
(Movimiento de Integración y Liberación Homosexual), Carla de la Fuente, dijo
para el periódico Publimetro de Chile que “Esta es una de las páginas
promotoras del odio más violentas y agresivas conocidas en Facebook, pero lo
que resulta especialmente alarmante es el número de seguidores que tiene.
Valoramos que tras la protesta virtual de ciudadanas y ciudadanos Facebook
elimine la página, pues sólo sirve para canalizar el odio, el desprecio y la
burla hacia sectores históricamente discriminados”. Finalmente Facebook eliminó la página en los primeros días de
febrero de este año.
La normativa de Facebook incluye la
prohibición de grupos con temáticas discriminatorias o que inciten al odio y
falten al respeto y la honra de las personas. Pero esto no se cumple en muchas
ocasiones, la prueba está en la cantidad de grupos como estos que existen en la
red social.
¿Pero es inconstitucional
cerrar este tipo de páginas? ¿Atenta contra la libertad de expresión?, ¿las
redes sociales son un terreno intocable por la censura oficial?
Según el abogado y especialista en regulación
y gestión de telecomunicaciones y nuevas tecnologías: Juan Carlos Garzón
Barreto, hay que tener en cuenta la
Sentencia C – 1147 de 2001 de la Corte Constitucional:"En Internet,
entonces, puede haber una realidad virtual pero ello no significa que los
derechos, en dicho contexto, también lo sean. Por el contrario, no son
virtuales: se trata de garantías expresas por cuyo goce efectivo en el llamado
“ciberespacio” también debe velar el juez constitucional”(…)“La libertad de
expresión no es un derecho absoluto por el contrario está sometida a límites
legales”.
Por otro lado, es necesario distinguir entre un acto de
censura y una prohibición legal previa.
El artículo 13 de la Convención Americana de los Derechos Humanos
establece lo siguiente: "Estará prohibida por la ley toda propaganda en
favor de la guerra y toda apología del odio nacional, racial o religioso que
constituyan incitaciones a la violencia o cualquier otra acción ilegal similar
contra cualquier persona o grupo de personas, por ningún motivo, inclusive los
de raza, color, religión, idioma u origen nacional”.
La psicóloga Andrea Figueredo
destaca que el odio no es una patología sino una emoción, la persona que odia
manifiesta una conducta hostil, agresiva y repulsiva. “Considero que en las redes sociales se crean grupos donde
se manifiesta el odio y discriminación debido a su gran capacidad de difusión
de los mensajes y la ausencia de modulación que sí está presente en las
relaciones cara a cara y que reduce la agresividad mediante un factor
emocional”, a esto añadió que la conciencia y la educación social son las
herramientas que se deben utilizar para disminuir la violencia en las redes
sociales ya que éstas no son el problema sino el mal uso y la falta de
controles.
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